El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Temuco condeno a Rafael Antonio Rojo Rivera y Juan Carlos Riquelme Sáez a las penas de cumplimiento efectivo de 20 años de presidio, más las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras duren las condenas, en calidad de autores del delito frustrado de robo con intimidación y violencia. Ilícito perpetrado en abril del año pasado, en la comuna.
En fallo unánime (causa rol 29-2024), el tribunal –integrado por los magistrados Luis Sarmiento Luarte (presidente), Rocío Pinilla Dabbadie y Carla Alarcón Mora (redactora)– condenó, además, a Rojo Rivera a 5 años de presidio, más las accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para cargos y oficios públicos durante el tiempo de la condena, como autor del delito consumado de porte ilegal de arma de fuego; y 541 días de reclusión, accesorias de suspensión de cargos u oficios públicos por el tiempo de la condena y multa de 5 UTM, como autor del delito consumado de receptación de especies.
En la causa, el tribunal condenó al acusado Jordan Alejandro Riquelme Sáez a la pena de 5 años y un día de presidio, más las accesorias legales de inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras dure la condena, como autor del delito frustrado de robo con intimidación y violencia, beneficiándolo la atenuante del artículo 11 N° 9 del Código procesal Penal; es decir, colaboración sustancial en el esclarecimiento de los hechos.
En cambio, los sentenciados Riquelme Sáez y Rojo Rivera, si bien también se les reconoció la atenuante de colaboración sustancial, registran condenas anteriormente por delitos similares y de igual o mayor pena, respectivamente, penas que quebrantaron al fugarse del penal de Osorno.
El tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que alrededor de las 09:10 horas del 17 de abril de 2023, Rojo Rivera y los hermanos Riquelme Sáez llegaron hasta una sucursal de telefonía en Temuco, con guantes, un barra, cuerdas y un arma de fuego (que mantenía encargo vigente por robo), lugar donde amenazaron a clientes y trabajadores del establecimiento comercial. Rojo Rivera apuntó con el arma de fuego a las víctimas, las llevó hasta una dependencia posterior, donde fueron maniatados y les exigieron la entrega de dinero y teléfonos de alto valor. Los acusados cargaron los aparatos celulares en bolsos y sustrajeron, además, el disco de las cámaras de seguridad de la tienda. El actuar de los acusados se vio interrumpido por efectivos de Carabineros que llegaron al lugar, los cuales procedieron a detener a los condenados.
Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas de los sentenciados para determinar sus respectivas huellas genéticas e inclusión en el registro de ADN de condenados.