La ministra de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, expuso ayer- miércoles 11 de octubre- en el seminario “Resurrección Digital ¿Hacia un mundo más humano?”, organizado por el Programa de Derecho, Ciencia y Tecnología de la Pontificia Universidad Católica de Chile y en el que participó junto al académico y director del centro, Raúl Madrid.
La identidad humana y la “identidad digital”, fue uno de los temas abordados por la ministra Vivanco, señalando que “en el mundo virtual, muchos de los rasgos que conforman naturalmente la identidad del sujeto se desdibujan y pueden ser reemplazados por una simbología característica o elementos artificiales (…) de allí es que la identidad digital no se configure necesariamente como una continuidad de la identidad humana real, sino como un constructo que puede tomar una o más partes de ella y agregar otros componentes a elección del interesado”.
En esa línea agregó que la “identidad digital de una persona no le pertenece exclusivamente como un campo de automodelación ya que se van registrando huellas de actividades o preferencias (…) permitiendo hacer cambios y selección de rasgos identitarios por parte del titular e introducir mediciones y una trazabilidad de conductas y manifestaciones que excede las posibilidades de control de la persona”.
Sobre la problemática de la resurrección digital, la ministra Ángela Vivanco explicó que se trata de la creación, mediante inteligencia artificial, de un verdadero clon que comparte características con una persona fallecida, actuación controvertida y problemática que “no radica precisamente en la propiedad de la información de las bases de datos, que se ha ido consolidando en diversos ordenamientos jurídicos, sino que con los espacios grises relativos a datos que no se pueden retirar del ciberespacio por las reglas de las plataformas, condiciones contractuales o legales que lo impiden o incluso porque los herederos de la original titular del material estén de acuerdo con su utilización posterior, por lo cual la discusión no recae sólo en un litigio sobre el consentimiento sino en el significado o alcances respecto de la necesaria relación entre la identidad o persona”.
En su intervención, la Ministra Vivanco destacó que el tema se relaciona estrechamente con la existencia y protección constitucional de los llamados neuroderechos, los cuales han sido reconocidos en la jurisprudencia de protección de la Tercera Sala de la Corte Suprema, a la cual pertenece.
Para el profesor de Filosofía del Derecho, Raúl Madrid, “el problema fundamental que tenemos acá, es que nos encontramos con un paradigma cultural diferente que va a hacer cambiar las maneras en que nosotros concebimos el derecho. La cuestión de fondo es como nosotros vamos a enfrentar el cambio de paradigma, es decir, como vamos a enfrentar la irrupción de la tecnología en criterios que han acompañado al derecho desde su origen y que van a hacer variar los fundamentos en cómo hemos concebido la estructura jurídica durante siglos”.
“Tiene que ver con expandir o ampliar la visión sobre el derecho a temas de fronteras y luego plantearlos y discutirlos porque evidentemente en un futuro, bastante inmediato, cada vez nos vamos a ir enfrentando a temas de esta especie, que, en el caso de los jueces vamos a tener que resolver y en el caso de la sociedad civil, de los que son destinatarios de la administración de justicia, van a tener que ver cómo se pueden resolver” finalizó la ministra Vivanco.
El seminario contó con público compuesto por profesores, estudiantes y profesionales del Derecho, cutas preguntas fueron respondidas al final de la actividad.