El Juzgado de Garantía de Tomé dejó sujetos hoy –miércoles 7 de junio– a las medidas cautelares de firma mensual y prohibición de acercarse a la víctima a los funcionarios de Carabineros R.A.M.S. y J.L.M.C., imputados por el Ministerio Público como autores del delito consumado de apremios ilegítimos. Ilícito perpetrado ayer en comisaría.
En la audiencia de formalización, la magistrada Ximena Martínez Parra acogió las medidas cautelares propuestas por la defensa, por estimarlas proporcionales, que dan protección a la víctima y aseguran la comparecencia de los imputados al proceso. Además, fijó en tres meses el plazo de investigación.
Al resolver las cautelar, la magistrada Martínez Parra consideró que el delito de “(…) apremio ilegítimo requiere, por su naturaleza, componentes que deben ser más sustantivos y macizos. El apremio ilegítimo es humillar, degradar a una persona, apremiar en términos potentes, persistentes para obligarlo a algo. Aquí más bien el tipo penal, al menos en este estadio procesal, a criterio de esta jueza, podría ser de vejación injusta o eventualmente, incluso, quedar contenido dentro del tipo penal propuesto por la defensa (violencia innecesaria contemplada en el 330 N° 4 del Código de Justicia Militar). Con los antecedentes que se ilustraron al tribunal, la dinámica que explican los testigos presenciales, el tipo penal de apremios ilegítimos todavía no está suficientemente satisfecho”.
Según el ente persecutor, aproximadamente a las tres de la madrugada de ayer, martes 6 de junio de 2023, funcionarios de Carabineros detuvieron a la víctima por incumplir la medida cautelar de prohibición de acercase a su pareja, por lo que lo trasladaron a un calabozo de la Primera Comisaría de Tomé, ubicada en calle Mariano Egaña N°1033. En dicho contexto, el detenido se apropió de una gargantilla que había sido incautada en otro procedimiento, lo que no fue advertido sino hasta el cambio de turno horas más tarde. Momento en que la policía le pidió al detenido que se sacara los zapatos y calcetines, por lo que optó por arrojar la cadenilla al piso. Procediendo el cabo segundo J.L.M.C. a pisar fuertemente un pie desnudo de la víctima y el suboficial R.A.M.S., a esposarlo y propinarle un golpe de puño, provocándole lesiones leves.