El presidente de la Corte Suprema, Juan Eduardo Fuentes Belmar, encabezó una nueva ceremonia de juramento de abogadas y abogados, oportunidad en que relevó la importancia de ejercer la profesión con lealtad y honestidad.
Estas reflexiones las realizó hoy viernes 5 de mayo, oportunidad en que se convirtieron en profesionales postulantes de Arica, Iquique, Copiapó, La Serena, Valparaíso, Chillán, Concepción, Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Santiago.
“Se trata de un hito que, aunque lo celebramos frecuentemente en este mismo salón y en las cortes de apelaciones, en cada ocasión está dotado de una identidad y características que lo transforman en un compromiso de por vida, plasmado en el juramento o promesa que acaban de dar, y que consiste en un verbo y dos adjetivos que diferencian la profesión jurídica de otras ocupaciones: desempeñar de manera honesta y con lealtad la abogacía, conceptos que llenan de un enorme contenido este pacto que hoy sellan con el país, explicó.
La autoridad resaltó que deben sumar, además, la excelencia humana y académica. “Esa honestidad y lealtad implica numerosos atributos que todo abogado y abogada debe ser capaz de desarrollar, y que no solo corresponden a la ética, buena fe y honradez, sino también, entre otros valores, a la excelencia, el más pleno conocimiento y la consciencia constante de los ejes fundamentales y principios básicos que permiten la existencia y fortalecimiento del estado de derecho y el adecuado ejercicio de la función jurisdiccional”.