Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Puente Alto condena a presidio perpetuo a autora del delito de parricidio

27-octubre-2022
El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Puente Alto condenó a Margarita Andrea Jerez Morales a la pena de presidio perpetuo, en calidad de autora del delito consumado de parricidio. Ilícito perpetrado en febrero de 2019, en la comuna.

El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Puente Alto condenó a Margarita Andrea Jerez Morales a la pena de presidio perpetuo, en calidad de autora del delito consumado de parricidio. Ilícito perpetrado en febrero de 2019, en la comuna.

En fallo unánime (causa rol 67-2022), el tribunal –integrado por los magistrados Claudia Pizarro Luco (presidenta), Juan Pablo Villavicencio Theoduloz y Sandra Naser Császár (redactora)– aplicó, además, a Jerez Morales las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares durante el tiempo de la condena.

Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas de la sentenciada para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.

El tribunal dio por establecido, más allá de toda duda razonable, que en el transcurso del 9 de febrero de 2019, en un domicilio ubicadoen comuna de Puente Alto, “(…) MARGARITA ANDREA JEREZ MORALES realizó diversos actos crueles e inhumanos en contra de su hija Natasha Alejandra Morales Jerez, nacida el 18 de junio de 2011, de 7 años de edad, a saber, sujeción de sus brazos, quemarle la zona de sus glúteos y genital, golpear su cabeza, en la zona del abdomen y tórax, lo que provocaron un traumatismo craneoencefálico con fractura, contusión hemorrágica en los pulmones con fracturas costales, laceración completa del lóbulo izquierdo y medio del hígado, laceración vascular e infiltración sanguínea del riñón izquierdo, lesiones que le causan la muerte por un politraumatismo. Esto sin perjuicio que la menor se encontraba desnutrida, con múltiples cicatrices de lesiones antiguas, entre ellas equimosis en extremidades, lesiones por sujeción antigua, quemaduras en zona de glúteo y sacra, y fractura en clavícula derecha”.