Un grupo de siete egresados juró hoy –viernes 28 de enero- en la Corte de Apelaciones de Temuco como nuevos abogados y abogadas, ceremonia llevada a cabo a través de videoconferencia desde la Corte Suprema, lugar donde se encontraban el presidente (s) Sergio Muñoz Gajardo, el Pleno de ministros y el secretario Jorge Sáez.
Los postulantes, que cursaron sus estudios en diversas universidades de la región, llegaron a primera hora para participar en la instancia, encabezada por el presidente del tribunal de alzada, ministro Alejandro Vera Quilodrán y el secretario (s) Christián Álvarez Barrios.
Como ha sido habitual en el último tiempo, debido a la crisis sanitaria, los licenciados debieron cumplir estrictas medidas de seguridad, sometiéndose a control de temperatura corporal al ingreso al edificio, portar su mascarilla durante toda la ceremonia, disponiéndose además de alcohol gel para sanitizado de manos y se ubicaron en sillas con distancia social. Asimismo, no pudieron ingresar con acompañantes para evitar el riesgo de contagios de coronavirus, entendiendo que de acuerdo con la resolución 591 exenta del Minsal, que asimila la entrega del título como un acto de atención de público del tribunal de alzada.
A su debido turno, antecedidos por los postulantes de Iquique, Antofagasta, Chillán y Concepción, los juramentados de Temuco pronunciaron un fuerte “sí, juro”, convirtiéndose en nuevos profesionales del derecho: Natalia Arias Poblete, Alessandro Bonilla del Río, Klaus Henzi Plaza, Daniela del Carmen Loaiza Lobo, Valentina Pradenas Leiva, Julio Thomas Soto, María Paz Ulloa López. Seguidamente juraron los postulantes desde Valdivia, Puerto Montt, Coyhaique y desde los distintos salones de la Corte Suprema.
Luego del cierre de la transmisión oficial, el presidente de la Corte de Apelaciones, Alejandro Vera, felicitó a los nuevos juristas en nombre del Pleno de ministros y de los integrantes del tribunal de alzada, haciendo extensivos sus parabienes a sus familias y personas significativas que aportaron en su formación, y los invitó a ejercer la profesión con compromiso social, integridad y responsabilidad, a fin de contribuir a la paz social y a la convivencia democrática, entregándoles el diploma que los certifica como abogadas y abogados.