Analizar el fenómeno del acoso sexual, considerando los desafíos en materia probatoria, fue el tema que se abordó en el seminario “Dificultades en la investigación y valoración de la prueba en las denuncias de casos de acoso sexual laboral”, organizado por la Secretaría de Igualdad de Género y No Discriminación del Poder Judicial en el marco de la conmemoración del Día del Trabajador y la Trabajadora el 1 de mayo próximo.

La actividad  virtual, en la que participaron 800 personas, contó con la presencia del presidente de la Corte Suprema, Guillermo Silva Gundelach; el fiscal nacional, Jorge Abbott; la ministra encargada de asuntos de género del máximo tribunal, Andrea Muñoz  e integrantes de las distintas jurisdicciones del país.

“A pesar de sus nocivas consecuencias, estos comportamientos lamentablemente gozan de una tolerancia social e incluso, en muchos casos, se traducen en conductas naturalizadas que no son identificadas como acoso sexual. Por desgracia el acoso sexual existe como una práctica extendida pero oculta, y, lamentablemente, el Poder Judicial no es ajeno a esta realidad” señaló en su discurso inaugural el presidente Guillermo Silva.

En este contexto, el abogado y académico de la Universidad Diego Portales, José Luis Ugarte, presentó los principales contenidos del informe en derecho sobre acoso sexual y sexista en el trabajo, elaborado a solicitud de la Secretaría Técnica de Igualdad de Género,  a partir de una revisión desde la doctrina y jurisprudencia.

Posteriormente, se realizó un conversatorio para conocer, desde las experiencias de distintas instituciones, las fortalezas, debilidades y aspectos críticos de las investigaciones disciplinarias  de acoso sexual. En él participaron la fiscala judicial de la Corte de Apelaciones de San Miguel, Carla Troncoso; la abogada de la Unidad de Investigaciones  Especializadas en Acoso Sexual, Laboral y Discriminación de la Universidad de Chile, Ximena Valencia, y el jefe de la Unidad de Protección de Derechos Funcionarios de la Contraloría General de la República, Luis Aranda.

En relación al informe de José Luis Ugarte, la ministra de la Corte Suprema, Andrea Muñoz, destacó la invitación “a considerar que el acoso sexual es un ilícito pluriofensivo, que lesiona derechos fundamentales y entender que la línea de la ilicitud es aquella que marca lo que el profesor llama “la falta de deseo”, donde el silencio de la trabajadora, por la causa que sea, no supone consentimiento; aquí, desde la perspectiva de género, no debemos olvidar que el acoso sexual se inscribe en un entramado de relaciones donde existe un desequilibrio de poder entre las personas, desfavorable y con mayor impacto sobre las mujeres, lo que unido a las dificultades de prueba, obstaculizan la denuncia por parte de la persona acosada”.

Finalmente, la ministra recalcó el firme compromiso del Poder Judicial  por trabajar en erradicar el acoso sexual de la institución, “dentro de lo cual resulta clave  fortalecer la comprensión del fenómeno y en eso el estudio del profesor Ugarte, es un valioso aporte  en la línea de brindar herramientas tanto para quienes les corresponde investigar,  como para los órganos que deben decidir  estos casos, debido a las dificultades prácticas en materia de producción de prueba, argumentación y razonamiento probatorio”, concluyó.