El presidente de la Corte Suprema, Ricardo Blanco Herrera, presidió hoy —miércoles 24 de diciembre— una nueva ceremonia de juramento de abogados y abogadas en el Salón de Honor del palacio de tribunales. En su discurso, la máxima autoridad judicial vinculó los valores universales de la festividad de Navidad con el compromiso ético y social que adquieren los nuevos profesionales del Derecho.
“La Navidad que esta noche celebraremos representa un hito que hace posible reflexionar sobre los valores universales que ella promueve, y que indudablemente se vinculan con el encargo social del cual desde hoy están investidos”, destacó el presidente Blanco.
En esa línea, subrayó que el ejercicio de la profesión debe estar marcado por la cercanía y la escucha: “Esta festividad nos invita a mirar a las personas con mayor cercanía, a reconocer su dignidad intrínseca, a practicar la solidaridad, la esperanza, la humildad y la paz. No se trata solo de una conmemoración religiosa o cultural, sino de un tiempo que interpela éticamente nuestra conducta personal y comunitaria".
El presidente de la Corte Suprema resaltó el rol del Derecho como motor de respeto y protección: "La dignidad de la persona, que la Natividad pone en el centro —al recordarnos el valor de cada vida, especialmente la más frágil—, es igualmente el fundamento último del Derecho. Todo orden jurídico que aspire a ser justo se construye a partir del reconocimiento de que todo individuo merece respeto, protección y un trato adecuado, sólo por el hecho de existir. Para quienes recién se incorporan a la profesión jurídica, este principio no puede ser una abstracción: debe traducirse en la forma en que escuchan, defienden y representan a quienes confían en ustedes".
Al terminar, destacó que "este día nos llama también a la solidaridad. A hacernos cargo de otro semejante que requiere de nuestra ayuda. En la abogacía se expresa en el compromiso con el acceso a la justicia, en la sensibilidad frente a las desigualdades, en la disposición a ejercer la profesión no solo como realización personal, sino como servidor".