En el Salón de Honor de la Corte Suprema se realizó la ceremonia de cierre de las prácticas laborales del Diploma en Habilidades Laborales de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Andrés Bello, instancia que marcó un hito para el Poder Judicial al integrar, por primera vez, a estudiantes que requieren apoyos para su aprendizaje y participación en diversas unidades del tribunal.

Esta iniciativa -impulsada por el Subcomité de Acceso a la Justicia de Personas y Grupos Vulnerables, liderado por la ministra Jessica González- reafirma el compromiso del Poder Judicial con la inclusión y la generación de entornos laborales abiertos, equitativos y respetuosos de la diversidad, promoviendo prácticas que enriquecen tanto los equipos de trabajo como la experiencia de los estudiantes.

A la actividad asistieron representantes de la universidad, funcionarios de las unidades donde se desarrollaron las prácticas y los ministros de la Corte Suprema Omar Astudillo, María Cristina Gajardo, María Soledad Melo y Andrea Muñoz, quienes destacaron el valor institucional de avanzar hacia ambientes más inclusivos y conscientes de las distintas realidades que componen el país.

Durante cuatro meses, los estudiantes realizaron pasantías en distintas áreas del Poder Judicial, entre ellas la Dirección de Bibliotecas y Centro Documental, la Dirección de Asuntos Internacionales y Derechos Humanos, la Cuarta Sala y la Presidencia, la Dirección de Comunicaciones y la Secretaría de la Corte Suprema. En cada una de estas unidades, los jóvenes -María Victoria Lago Carrasco, Pablo Trovero Sáez, Isidora Pacheco Navarrete, Jorge Martínez Valencia, Héctor Rojas Pérez y Eloísa Parra Schaerer- fueron acompañados por equipos que valoraron su aporte, su motivación y su disposición a aprender.

La ministra Jessica González resaltó que “los estudiantes lograron integrarse exitosamente a equipos que desarrollan tareas muy diversas, lo que les permitió conocer nuestra institución y comprender de cerca nuestra labor”. Agregó que “pudieron ser parte activa de los equipos, fortaleciendo habilidades que serán claves para integrarse en futuros entornos laborales”.

La directora Sede Santiago del Diploma en Habilidades Laborales, María Fernanda Órdenes, subrayó que “la inclusión es un compromiso cotidiano que nace desde nuestras convicciones más profundas y se concreta en prácticas como las que vivimos junto a ustedes. Así construimos una cultura donde todos tenemos acceso al aprendizaje y a la participación”.

Uno de los participantes, Héctor Rojas, relató su experiencia con emoción: “Mi práctica fue muy significativa. Aprendí mucho y mis compañeros me recibieron con mucha amabilidad y me hicieron sentir parte del equipo”.

La implementación de esta iniciativa significó un crecimiento para la institución, incorporando nuevas perspectivas a la labor judicial y generando un impacto positivo tanto para los equipos como para los estudiantes.