Con la participación de dos expertos internacionales representantes de la ONU, el equipo encargado de la redacción del Código de Ética del Poder Judicial, que lidera la ministra de la Corte Suprema Adelita Ravanales, continúa avanzando en el trabajo de entrevistas para la redacción del texto.
En esta ocasión, el grupo se reunió vía Zoom con Cristina San Juan, Integrante del Equipo de Integridad Judicial del Programa Mundial para la implementación de la Declaración de Doha de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito; y con Felipe Falconi, Oficial de Prevención del Delito y Justicia Penal.
Durante la jornada estuvieron presentes, además, Mauricio Chía, juez de Iquique y director nacional de la ANMM a cargo de la comisión de integridad judicial, y Victoria Gallardo, jueza de La Serena y coordinadora de la Comisión de Integridad Judicial.
El programa contempló un análisis del borrador del texto ético y la mirada desde la perspectiva propia de cada experto.
“Siempre encantados de poderles dar retroalimentación, un poco de experiencias regionales, cómo bajarlas al caso concreto de Chile y también encantados de ver cómo hay esta coordinación que también se están incluyendo a otros actores para trabajar todos juntos. En el código vemos todas las diferentes aportaciones que se están haciendo, entonces nosotros encantados de seguir en este proceso en todo lo que podamos apoyar”, dijo Cristina San Juan.
“Todas estas diferentes cuestiones y desde nuestra oficina siempre creemos que siempre como lo dice Felipe, es fundamental este proceso de cocreación, de poner varias manos, varios puntos de vista y trabajar todos juntos en ello. Así que enhorabuena a todos los presentes también por ese compromiso y por todo este trabajo que vemos que poco a poco ya va cobrando forma”, concluyó.
En tanto, la ministra Ravanales agradeció la participación y dedicación de ambos profesionales y destacó que todos los trabajos asociados a la ética son permanentes en el tiempo. “Yo creo que nada está escrito en piedra, menos en esto de la ética. Se necesita que podamos actualizarnos cada vez más, viendo cuáles son los problemas, por dónde van irrumpiendo conductas que van contra la ética. O sea, creo que no es un trabajo que se va a acabar tampoco en octubre, siempre vamos a tener que seguir y dialogando con expertos internacionales en forma permanente”.
En el marco del AD-1-2024, la Corte Suprema encomendó a la ministra Ravanales la elaboración y puesta en marcha de un plan de acción para diseñar, discutir y proponer un Código de Ética Judicial que resulte aplicable a todos los integrantes del Poder Judicial. En el encargo, el Pleno dispuso que la tarea debía ejecutarse de manera participativa, asegurando la participación de expertos, los distintos gremios y estamentos que conforman el Poder Judicial.