El Primer Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó a Rafael Arnaldo Contreras Silva a la pena de cumplimiento efectivo de 12 años de presidio, más las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares durante el tiempo de la condena, en calidad de autor del delito consumado de homicidio simple. Ilícito perpetrado en septiembre de 2023, en la comuna de Lo Prado.
En fallo unánime (causa rol 42-2025), el tribunal –integrado por los magistrados Irma Tapia Valdés (presidenta), Mónica Urra Zúñiga y Claudio Henríquez Alarcón (redactor)– condenó, además, a Contreras Silva a la pena de 7 años de presidio efectivo, accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares durante el tiempo de la condena; más el pago de una multa de 10 UTM, como autor del delito consumado de tráfico ilícito de drogas.
Asimismo, Contreras Silva deberá purgar 541 días y 300 días de reclusión y la accesoria de suspensión de cargo y oficio público durante el tiempo de las condenas, como autor de los delitos consumados de porte ilegal de municiones y amenazas no condicionales.
Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas al sentenciado para determinar su huella genética e incorporación en el registro nacional de ADN de condenados. Además, se decretó el comiso y destrucción de la droga, contenedores, municiones y teléfono celular incautados en el procedimiento policial. En el caso del dinero y del vehículo (previo remate) se ordenó su entrega al Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol.
El tribunal dio por establecido, más allá de toda duda razonable, que alrededor de las 10 horas del 5 de septiembre de 2023, “(…) Fernando Valenzuela Ortega se encontraba en su domicilio de calle Pomassi N°6539, Lo Prado, llegó al lugar en un automóvil color blanco, marca Nissan, con parachoques delantero color negro, patente GDPP-16, Rafael Arnaldo Contreras Silva, quien en compañía de otros dos sujetos no identificados y premunidos de armas de fuego, procedieron a disparar en reiteradas ocasiones a Valenzuela Ortega, siendo alcanzado por varios de los disparos que le ocasionaron traumatismo torácico abdominal, pélvico y en extremidades, lesiones que le produjeron la muerte.
Posteriormente, ese mismo día, en horas de la tarde “(…) Rafael Arnaldo Contreras Silva, al enterarse que Maribel Quiroz Muñoz, familiar de la víctima del homicidio, Fernando Valenzuela Ortega, se encontraba hablando con funcionarios policiales, mediante mensajes de Whatsapp, de manera seria y verosímil, la amenazó a ella y a su hijo menor, Pedro, de dispararle y que le iba a reventar y quemar su vivienda”.
El segundo hecho acreditado se registró aproximadamente a las 00:20 horas del 6 de septiembre de 2023, ocasión que “(…) personal policial recibió un comunicado de que en calle Coronel Alfonso Ugarte N°6328, Lo Prado, unos sujetos se encontraban disparando desde un automóvil de color blanco, por lo que concurrieron a dicha dirección, sorprendiendo a Rafael Arnaldo Contreras Silva en las afueras de ese domicilio, quien se encontraba como conductor del automóvil marca Nissan, color blanco, placa patente única GDPP-16 junto a un sujeto desconocido, el que al ver la presencia policial se dio a la fuga en el mismo vehículo, siendo, entonces, seguido por los funcionarios de Carabineros hasta que, finalmente, Contreras Silva perdió el control del móvil, colisionando contra una señal de tránsito ubicada en la esquina de la calle Territorio Antártico con avenida La Torres, de la comuna de Lo Prado.
Al ser fiscalizado, Contreras Silva por el personal policial, se le sorprendió portando y manteniendo en su poder, en la maletera del automóvil que conducía, un bolso de color negro, en cuyo interior se encontraron dos barras en estado sólido de pasta base de cocaína con un peso total de 764,1 gramos, además de una bolsa de nylon con clorhidrato de cocaína con un peso de 282,3 gramos y la cantidad de $645.510 en monedas y billetes de baja denominación.
Además, en el asiento del conductor se halló una munición de calibre 9 mm no percutada, marca Luger, sin tener el permiso para porte y/o tenencia de municiones”.