Analizar los escenarios en los que se aplica diariamente los derechos humanos, especialmente respecto del trabajo que se desarrolla en tribunales, fue el objetivo de la charla “La protección nacional de los Derechos Humanos” impartida por el ministro de la Corte de Apelaciones, Pablo Droppelmann Cuneo, y en la que también participó como panelista la ministra Carolina Figueroa Chandía.

La actividad, que forma parte del cumplimiento de metas institucionales, se realizó en el auditorio del tribunal de alzada porteño en modalidad híbrida, lo que permitió la asistencia de 233 personas entre magistrados y funcionarios de la jurisdicción Valparaíso.

Durante su exposición, el ministro Droppelmann se refirió a aquellos valores que son los pilares de  los derechos humanos, como los que sustentan el derecho a la vida, la libertad, la integridad física y psíquica, pero también detalló que para su mejor comprensión, es posible clasificarlos en derechos objetivos (valores sociales imperantes) y derechos subjetivos (valores que emanan de la naturaleza humana).

Se trata de derechos que “nuestra sociedad ha estimado que son derechos humanos y que se regulan a través de la Constitución y las leyes, como la igualdad ante la ley, el derecho a no ser discriminado, derecho a igual protección de la ley, el derecho al olvido, el derecho a reunirse pacíficamente sin permiso previo, la igualdad en repartición de los tributos (proporcionalmente) y el derecho de propiedad”.

Sin embargo, planteó el ministro Droppelmann, estos derechos también se materializan en el trabajo diario y en particular en la función judicial, considerando que “nuestra tarea tiene que ver con el bien común, porque lo que hagamos afecta los derechos de las personas” y, a modo de reflexión, agregó que “somos garantes de los derechos humanos, no sólo de la sociedad, sino también con nuestra gestión y respetando los derechos humanos de las personas con las que trabajamos”.