Una inspección a centros penitenciarios de La Serena realizó la comisión de visita a cárcel de la jurisdicción, integrada por el ministro de la Corte de Apelaciones Juan Carlos Espinosa, la jueza del Tribunal de Juicio Oral Marjorie Montero, el juez de Garantía Pedro Rojas y la secretaria(s) del tribunal de alzada, Viviana Carvajal.

En la visita recorrieron el complejo penitenciario Huachalalume, principal cárcel de la región de Coquimbo, con capacidad para 2.318 internos; así como los centros de internación provisoria y de internación en régimen cerrado y semicerrado del Servicio de Reinserción Juvenil, que reciben a menores de edad infractores de ley.

La iniciativa, establecida en el artículo 578 del Código Orgánico de Tribunales, se ejecuta dos veces al año en el contexto del proceso de la revisión de libertades condicionales.

“Es una contrapartida necesaria vigilar la situación de los internos, los cuales se encuentran privados de libertad, sea cumpliendo una condena o por causa de la prisión preventiva, siendo, por tanto, deber de esta Corte vigilar que la afectación de sus derechos solo diga relación con la privación de su libertad, de tal forma que si existen otras condiciones que agravan esa afectación debemos tomar las medidas eh que sean indispensables para corregirlas”, comentó el ministro Espinosa.

En el recorrido por Huachalalume, la comisión observó en terreno el funcionamiento de los recintos, visitó módulos e inspeccionó sus condiciones, verificando aspectos como salud, seguridad, orden e higiene. Así también, interactuaron con internos e internas que quisieron manifestar consultas o realizar reclamos. 

En el Centro de Internación en Régimen Cerrado IRC del Servicio de Reinserción Juvenil, la comitiva visitó las viviendas donde permanecen los jóvenes infractores de ley y conversó con ellos. Además, se reunió con el director del establecimiento, Claudio Mora Lizama.

“Ha sido un trabajo arduo hasta ahora y en eso creo que es importante la visita tanto de magistratura o de entes externos que puedan de alguna manera también constatar el terreno, cuáles son las deficiencias que podemos tener y cuáles son los avances que hemos logrado. También eso nos permite que en algún momento nos puedan hacer observaciones y de esa manera también ir avanzando y corrigiendo aquellas observaciones que se nos puedan realizar”, indicó Mora.

El mismo tenor de las inspecciones se realizaron en el centro de internación en régimen semicerrado, donde las y los jóvenes pueden realizar actividades para su reinserción y también en el medio libre. 

El informe con el detalle de las observaciones de la visita es remitido a la Corte Suprema, el Ministerio de Justicia y a cada centro penitenciario.