El Juzgado de Pozo Almonte dejó hoy –jueves 27 de febrero– sujeta a las medidas cautelares de arraigo nacional y firma quincenal a M.C.A., imputada por el Ministerio Público como autora de los delitos de maltrato y abandono de menor. Ilícitos perpetrados la semana pasada, en la comuna.

En la audiencia de formalización, el magistrado Víctor Sanhueza Bravo acogió las medidas subsidiarias del Ministerio Público con el allanamiento de la defensa, al considerarlas proporcionales y adecuadas a los fines del procedimiento. Además, fijó en 60 días el plazo de investigación.

Al resolver las cautelares a imponer a M.C.A., el tribunal sostuvo que: “Si bien se argumenta que la petición de la prisión preventiva está fundada en un instructivo general de la fiscalía nacional, el tribunal sostiene que el análisis de la prisión preventiva debe ser caso a caso y nunca de forma general, puesto que la prisión preventiva, de acuerdo con lo que dispone el artículo 139 y siguientes del Código Procesal Penal, es la medida cautelar de máxima intensidad y que debe ser siempre utilizada de forma restrictiva y no general”.

El magistrado añadió que: “En este caso particular, a pesar que la imputada es una ciudadana extranjera y que no tiene ingreso regular al país, está identificada su identidad, fijó un domicilio en Chile, no posee antecedentes pretéritos, ha sido formalizada por simples delitos, uno de ellos incluso tiene asociada una pena de multa y el otro una pena de presidio menor, que así las cosas aun cuando se le encontrara responsable de los delitos por los cuales ha sido formalizada, con los antecedentes expuestos la pena no sería de cumplimiento efectivo. Además, sobre ella pesa la presunción de inocencia y el tribunal conforme las máximas de la experiencia puede hacer un análisis de prognosis de sanción, y estima que someterla a una prisión preventiva resulta absolutamente desproporcionado”.

Según el ente persecutor, aproximadamente a las 11:00 horas del miércoles 19 de febrero de 2025, la imputada de nacionalidad boliviana, se encontraba realizando labores de pastoreo en un sector ubicado a más de ocho kilómetros de la localidad de Victoria, en Pozo Almonte. En dicho contexto, dejó a la víctima, su hijo de dos años de edad, en un lugar solitario y sin ningún tipo de resguardo.

Tiempo después, al regresar al lugar se percató de que el menor no se encontraba, por lo que comenzó a buscarlo y dio aviso a familiares, quienes se sumaron a la búsqueda al igual que otros residentes del poblado. Cerca de las 18 horas, la imputada alertó a Carabineros de lo sucedido, personal que, junto a Bomberos y con el uso de drones térmicos, iniciaron un operativo de rastreo.