La Corte de Arica rechazó hoy –viernes 27 de diciembre– el recurso de apelación y mantuvo sujeta a las medidas cautelares de firma mensual, arraigo nacional y prohibición de acercarse a las víctimas, a carabinera imputada por el Ministerio Público como autora del delito consumado y reiterado de estafa. Ilícitos perpetrados 2021, en la ciudad.
En fallo unánime (causa 1082-2024), la Primera Sala del tribunal de alzada –integrada por las ministras Juana Ríos Meza, Claudia Arenas González y la abogada (i) Claudia Moraga Contreras– confirmó la resolución impugnada, dictada por el Juzgado de Garantía de la Arica.
“Teniendo presente los antecedentes expuestos en la audiencia, compartiendo los fundamentos de la decisión y especialmente no habiendo sido discutidas las letras a) y b) del artículo 140 del Código Procesal Penal, y teniendo presente la cantidad de delitos que se han atribuido a la imputada, el número de personas afectadas, antecedentes que indican que resultan totalmente proporcionadas las medidas cautelares impuestas, SE CONFIRMA la resolución apelada de dieciocho de diciembre en curso, y se confirman por tanto las medidas cautelares establecidas para (…) por el Juzgado de garantía de esta ciudad”, consigna el fallo.
Según el ente persecutor, entre agosto y diciembre de 2021, la recurrente junto a otros ocho imputados, algunos de ellos a la sazón también efectivos de Carabineros, invitaba a las víctimas, incluidos ellas miembros de la institución policial, a participar en un juego que denominaba “Mandala” o “Alquimista”, que prometía multiplicar por ocho el monto que invirtieran. Para sumarse al esquema, cada interesado debía redactor dos cartas. En la primera debían pedir integrarse al juego y, en la segunda, manifestar que el dinero depositado correspondía a un “regalo”. La segunda condición era captar a dos nuevos interesados.
Para sumarse al “Mandala”, los postulantes debían pagar dos mil euros (equivalente a $1.800.000) y luego, los imputados los agregaban a grupos de la aplicación Telegram denominado “Tejiendo felicidad”, “Sueño de luz” o “Hermosa espera”.
Al pasar las semanas, las víctimas que comenzaban a desconfiar y a exigir la devolución del dinero invertido, eran eliminados o bloqueados y sin lograr recuperar la inversión.