El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Chillán condenó hoy -sábado 14 de diciembre- a Marco Antonio Orellana Basáes a la pena única de presidio perpetuo, como autor de los delitos reiterados de violación de menor y mayor de 14 años y los delitos reiterados de abuso sexual de menor y mayor de 14 años de edad y la pena única de 15 años de presidio como autor de los delitos de producción de material pornográfico infantil, y almacenamiento de material pornográfico infantil, Ilícitos cometidos entre 2011 y 2021, en la comuna.
En resolución unánime, el tribunal –integrado por los magistrados Juan Pablo Lagos (presidente), Adriana Knopel y Christian Osses (redactor)– condenó además a Alexis Andrés Marín Cornejo a la pena única de 15 años y un día de presidio como autor del delito reiterado de violación de menor y mayor de 14 años de edad y la pena única de 5 años y un día de presidio como autor del delito reiterado de producción de material pornográfico infantil; a Juan Carlos Castro Riquelme a la pena única de 17 años de presidio como autor del delito reiterado de violación de menor y mayor de 14 años de edad y la pena única de 5 años y un día de presidio como autor del delito reiterado de producción de material pornográfico infantil; a Mauricio Elías Iturra Carrasco la pena de 5 años de presidio como autor del delito de violación contra mayor de 14 años de edad y la pena de 3 años y un día de presidio como autor del delito de producción de material pornográfico infantil.
Asimismo, condenó a Christian Edgardo Peña Fonseca a la pena de 7 años de presidio, como autor de los delitos reiterados de estupro y 4 años de presidio como autor del delito de producción de material pornográfico infantil.
El tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que Marco Antonio Orellana Basáes y otros desde el año 2011, realizó actos de connotación sexual y pornografía contra la víctima cuando tenía 8 años y durante diez años.